El último intento de lanzamiento del Starship de SpaceX se vio frustrado a menos de 30 segundos de su despegue, marcando la primera cancelación de este tipo desde 2023.
La compañía de Elon Musk detuvo la cuenta regresiva cuando surgieron problemas tanto en la etapa propulsora Booster 15 como en la nave Starship 34, generando incertidumbre sobre la viabilidad del vuelo.
Un parón tras dos años de éxito
La última vez que SpaceX abortó un lanzamiento en esta fase fue en abril de 2023, cuando una válvula congelada impidió el despegue del Booster 7. Desde entonces, la empresa había logrado completar múltiples pruebas sin inconvenientes de última hora. Sin embargo, en esta ocasión, la misión número ocho quedó en suspenso cuando el equipo de ingenieros detectó irregularidades en la presión de encendido de los motores.
"Demasiados factores desconocidos"
Como es costumbre, Elon Musk compartió detalles sobre el incidente a través de redes sociales. "Demasiadas incógnitas en este vuelo", comentó, explicando que la presión del sistema de ignición se encontraba 20 bares por debajo de lo necesario. Esta presión es fundamental para que los motores reciban la cantidad de gas adecuada y puedan encenderse correctamente.
Próximos pasos de Starship
Tras la cancelación, SpaceX informó que su equipo está evaluando el mejor momento para un nuevo intento de despegue. Según Musk, será necesario desmontar las dos etapas del cohete y realizar inspecciones detalladas, lo que podría tomar entre uno y dos días. En pruebas anteriores, la empresa ha conseguido realizar un segundo intento en un margen de 48 horas.
Para un nuevo lanzamiento, SpaceX deberá reponer las 4.900 toneladas de metano y oxígeno líquido utilizadas en la plataforma, una tarea logística que requiere la llegada de numerosos camiones cisterna hasta la base de operaciones.
Expansión de SpaceX en Florida
Mientras se resuelven los problemas técnicos, SpaceX anunció la construcción de una nueva instalación en el Centro Espacial Kennedy, en Florida. Esta fábrica, denominada "Gigabay", contará con 24 estaciones de ensamblaje y grúas más potentes que las de Starbase, en Texas. Se espera que esté operativa en 2026, mientras que el primer lanzamiento de Starship desde Cabo Cañaveral podría ocurrir en 2025, siempre que se obtengan las aprobaciones ambientales necesarias.
A pesar de este revés, SpaceX sigue adelante con su ambicioso plan de convertir a Starship en el vehículo clave para futuras misiones espaciales, incluyendo el programa Artemis de la NASA y la colonización de Marte.