La misión lunar Blue Ghost 1 se despide tras su éxito rotundo

La misión Blue Ghost 1, liderada por la NASA y la empresa privada Firefly Aerospace, ha marcado un hito en la historia de la exploración lunar al completar con éxito todos sus objetivos científicos. Esta misión se convierte en la primera de EE.UU. en lograr un alunizaje perfecto desde la mítica Apolo 17 en 1972.

El módulo de aterrizaje Blue Ghost se posó con éxito el pasado 2 de marzo en el Mare Crisium, una vasta llanura de basalto en la Luna. Durante los 14 días terrestres de operación, la sonda utilizó sus 10 instrumentos científicos para llevar a cabo numerosos experimentos y recopilar valiosos datos sobre la superficie y el entorno lunar.

Entre los logros más destacados de la misión se encuentra la grabación, en alta definición, de una puesta de sol lunar, algo jamás capturado anteriormente y que ningún astronauta ha presenciado en persona.

Además, la sonda registró imágenes de un eclipse solar total visto desde la superficie lunar el pasado 14 de marzo, proporcionando perspectivas únicas sobre la interacción entre la Tierra, el Sol y la Luna.

El pasado 16 de marzo, tras cumplir con éxito todos sus objetivos, Blue Ghost se apagó para siempre ante el implacable frío de la noche lunar, donde las temperaturas caen hasta los –175ºC, imposibles de soportar para sus circuitos y baterías. Aunque la sonda no estaba diseñada para resistir estas condiciones, su legado permanecerá como un símbolo del éxito y el potencial de la colaboración entre agencias espaciales y el sector privado.

El triunfo de Blue Ghost 1 no solo revitaliza la confianza en el programa CLPS (Servicios Comerciales de Carga Lunar) de la NASA, sino que también prepara el camino para futuras misiones tripuladas del programa Artemis, cuyo objetivo es llevar nuevamente a humanos a la Luna.

Este hito marca un nuevo capítulo en la exploración lunar, demostrando la capacidad tecnológica y científica para alcanzar nuevos límites en la frontera del conocimiento espacial.