En la actualidad, la energía solar es una de las fuentes de energía limpia más conocidas. Sin embargo, el futuro energético parece apuntar a la energía inalámbrica espacial recolectada con paneles solares espaciales.
La energía solar se ha convertido en una de las fuentes clave de energía limpia. A través de paneles que captan la luz solar, personas en todo el mundo implementan esta modificación de paneles rectangulares en el techo de sus hogares para obtener energía.
Pero si bien esta alterativa energética resulta más limpia y desde hace algún tiempo también ha empezado a ser implementada por numerosas empresas, es una fuente de energía que tiene un inconveniente: no se puede aprovechar la energía del sol cuando cae la noche.
Para funcionar de forma óptima, estos paneles solares necesitan recolectar toda la luz solar que puedan. ¿Pero entonces cómo lidiar con este inconveniente?
La respuesta está en la energía espacial y las nuevas investigaciones para llevar paneles hasta el espacio exterior.
El proyecto de energía inalámbrica espacial
Como una forma de lograr que los paneles capten la máxima energía posible, los investigadores se encuentran trabajando en la posibilidad de enviar al espacio varios paneles solares, que al entrar en órbita, podrían absorber la energía solar sin interrupciones.
Según la teoría, los paneles solares absorberían directamente desde el espacio la energía del Sol, por lo que podría recolectar una gran cantidad de energía sin inconvenientes de días nublados o que el sol se oculte por la noche.
Con la energía recolectada, se pasaría a transmitir a la Tierra de forma inalámbrica mediante microondas. De esta manera, la energía podría estar siempre disponible, sin verse afectada por el clima, llegando a cualquier lugar del planeta.
Energía inalámbrica espacial: la solución para alimentar la Tierra con energía limpia
El concepto de este proyecto se basa en un montaje modular, integrando elementos 2D ultraligeros. Mediante la integración de la energía solar, sumado a la conversión de RF, hace posible la distribución de energía por toda la estructura, ayudando a reducir el peso y la complejidad del proceso.
Este concepto también ayudaría a evitar el impacto de fallas en el sistema y ofrecer mayor escalabilidad. Es un proyecto que resolvería la necesidad de energía limpia para el planeta Tierra, con ayuda de la implementación de tecnologías ligeras y precisas fotovoltaicas de alta eficiencia.
Los orígenes de la investigación de la energía solar basada en el espacio
La investigación de la energía solar basada en el espacios se remontan a inicios de los años 1900, cuando Konstantin Tsiolkovsky, científico y matemático ruso, creó diseños futuristas en los que imaginó una tecnología creada por los humanos que llegara más allá de nuestro planeta.
Sus diseños mostraron cosas como cohetes, ascensores espaciales y energía solar. Y desde que el primer panel solar de hormigón fue diseñado en los años 50 por Bell Labs, los científicos de países como Estados Unidos, Japón y el Instituto de Tecnología de California que encabeza el Proyecto de Energía Solar Espacial, han estado trabajando para dar vida a este proyecto.
Energía inalámbrica espacial la solución para alimentar la Tierra con energía limpia
Al margen de la investigación de Tsiolkovsky, Nikola Tesla, inventor de la corriente alterna, trabajaba en una forma de transmisión de electricidad inalámbrica, y tenia planes de hacerla extensible a todas las personas del planeta Tierra. El proyecto no tuvo éxito por falta de financiación.
Entre los años sesenta y setenta, la energía solar espacial fue investigada de manera extensa mientras se llevó a cabo el programa espacial Apolo. Aunque los materiales y recursos tecnológicos de la época no permitieron alcanzar el objetivo.
Pero con la tecnología actual, no pasaría mucho para que los paneles solares llegaran al espacio con el proyecto de energía solar espacial Caltech.
Proyecto de energía solar espacial Caltech
El programa Caltech se ha enfocado en trabajar en base a la reducción de la masa del componente con el fin de que la energía solar espacial sea económica. A diferencia de otros diseños de paneles solares, este proyecto sugiere que se envíen a órbita de “mini paneles solares” parecidos a las baldosas que sean más ligeros y compactos.
Cada una de las tejas solares espaciales tiene la capacidad de recolectar energía solar usando el proceso de energía fotovoltaica. Las baldosas se conectarían en el espacio, creando una fuente gigante de energía renovable flotando cerca de la Tierra.
Posteriormente, la energía llegaría al planeta por medio de la radiación de microondas hacia área similares a los campos de paneles solares en el desierto, equipados con antenas para recibir la energía.
De acuerdo al equipo tras este proyecto, no hay peligro en las microondas recibidas o interferencias con señales como las de telefonía móvil, ya que la densidad de potencia recibida equivaldría a la que recibiría el planeta en un día soleado.
Energía inalámbrica espacial: la solución para alimentar la Tierra con energía limpia
Como parte del proyecto, el demostrador de energía solar espacial (SSPD-1) de 50 kg de peso, fue lanzado a bordo de un cohete SpaceX el 3 de enero de 2023 y ahora sabemos que el proyecto ha sido todo un éxito.
Energía limpia y renovable 24/7 para la Tierra
Con este proyecto de energía solar espacial la Tierra podía ser alimentada con energía las 24 horas del día, los siete días de la semana.
Este tipo de energía tiene la virtud de disminuir de manera significativa la huella de carbono, que hoy más que nunca es un tema de discusión ante la situación climática.
El tema del clima está en el ojo del huracán y los líderes de todo el mundo están siendo cuestionados acerca de este proyecto, como una oportunidad para luchar contra la crisis climática mundial.
CNET Science ha destacado las futuras estrategias que podrían ayudar a los países a disminuir las emisiones de carbono. Y se ha mencionado que a pesar de la inversión en la energía solar basada en el espacio, también es necesaria la descarbonización de los sistemas de energía actuales.
Aunque la innovación verde sí aportaría mucho a limitar el nivel de calentamiento global por debajo de 2 grados Celsius, al llegar a finales de siglo.
Por esta razón, la energía espacial solar que durante décadas solo vivió en la mente de los científicos y fanáticos de la ciencia ficción, ahora podría contribuir con la salvación del planeta.